Hay ocasiones en las que podemos olvidarnos de la importancia que tiene el mantenimiento de la puerta de garaje en las instalaciones comunitarias. Es frecuente que nos despreocupemos de ello y que solo acudamos a profesionales cuando se produce algún tipo de incidencia o problema con la misma. Pero lo cierto es que es necesario que estemos preparados, dado que existen ciertas obligaciones sobre su mantenimiento que deberíamos cumplir si no queremos exponernos a posibles problemas.
La obligación del propietario
El código civil de la ley española indica de forma clara cómo que el propietario es responsable de daño que produzcan sus bienes. En ocasiones se desconoce este punto de la ley y las distintas consecuencias negativas que se pueden producir de ello son elevadas.
Según la ley, el propietario de los edificios tiene la completa responsabilidad de cualquier tipo de incidente que se produzca debido al mal estado de una puerta de garaje comunitaria. El problema será mayor en el caso en el cual haya reparaciones necesarias que no se hayan realizado por falta de ese servicio de mantenimiento. En los artículos 395 y 1907 de la ley se indica cómo es obligatorio contar con estos servicios.
Entre las obligaciones no solo se encuentra la de realizar los procesos de mantenimiento obligatorios según la ley, sino también actualizar las puertas según las nuevas normativas de seguridad cuando se publiquen o realizar revisiones periódicas que permitan evitar problemas mayores.
Evitar situaciones problemáticas
Si ley determina que los propietarios de los edificios y de instalaciones comunitarias tienen que llevar a cabo el mantenimiento y revisión de las puertas de garaje es para evitar situaciones judiciales no deseables para nadie.
Pero también son muchas las ocasiones en las que familias, trabajadores y cualquier otro tipo de residente, se ha encontrado con que no podía salir con su vehículo del garaje debido a un problema con la puerta. Esto puede ocurrir en momentos en los que existen alternativas y en los que el coche no es realmente necesario, pero lo cierto es que también se pueden producir en situaciones de urgencia.
Tener que ir al trabajo con el coche, llevar a los niños a la escuela sin posibilidad de hacerlo a pie por falta de tiempo o incluso salir de vacaciones un fin de semana en el cual el proceso de reparación de la puerta llevará más tiempo del previsto, son algunas de las situaciones que se pueden producir por esta falta de mantenimiento.
Es importante que para evitar estas situaciones y ante la posibilidad de que se produzcan gastos adicionales o problemas derivados de una avería inesperada, se contraten los servicios de mantenimiento pertinentes. Contactar con empresas del sector en www.todocarpinteriametalica.es, es una de las mejores decisiones que podemos tomar, dado que nuestros profesionales se ocuparán de la revisión y el mantenimiento de la puerta a todos los niveles. Asegurarnos de que el funcionamiento es el correcto y mantener supervisada la puerta ayudará a que nunca haya que preocuparse de nada.